Alimentación y salud

¿Croissant curvo o croissant recto?

Uno de nuestros grandes momentos durante el día es ese desayuno con un cafecito calentito y una apetitosa pieza de repostería como las que todos los días hornea Martín Martín. Hoy vamos a hablar sobre el origen y las curiosidades de la pieza más popular de todas… ¡EL CROISSANT!

Por si no lo sabías, la palabra croissant en francés significa creciente, en el sentido de “cuarto creciente lunar” y se refiere a la forma original del bollo, aunque hay muchas opiniones diferentes en cuanto a la forma del croissant… Se trata de una masa hecha con harina, levadura, mantequilla o margarina extendida a todo el mundo con muchísimas versiones diferentes.

Pero… ¿Sabes de dónde viene realmente este bollo?

Por raro que parezca su creación no es francesa, sino austriaca, y se sitúa en la Viena del Siglo XVII, durante el asedio de las tropas del Imperio Turco frente a las puertas de dicha ciudad. Como la ciudad estaba completamente rodeada por una gran muralla, la estrategia que idearon los turcos fue excavar el terreno por debajo de la misma, hasta desembocar en el centro de la ciudad.

Para que nadie les descubriese lo que hacían los turcos era trabajar por las noches, con la mala suerte de que los panaderos que también trabajan a esas horas, se dieron cuenta y dieron la voz de alarma. Gracias a ellos toda la ciudad y el ejército pudo evitar el ataque del invasor, que no tuvo más remedio que retirarse.

Como celebración de esa gran victoria, el emperador condecoró a los panaderos los cuales crearon un bollo con forma de luna creciente, exactamente la misma que aparecía en la bandera turca. El croissant simbolizó la manera figurada de “comerse a un turco”.

¿Cómo pasó este bollo a Francia?

El militar de nacionalidad Austriaca August Zang abrió una panadería vienesa en la capital francesa, París. El éxito de su “pan vienes” fue tan sumamente grande que muy pronto fue imitado por las demás panaderías parisinas, sus piezas pasaron a ser conocidas como “viennoiserie”, un término que hoy en día se utiliza para hablar de la repostería hojaldrada.

A partir de aquí los franceses lo hicieron “suyo”, dándole la nacionalidad, creando su propia versión, está más hojaldrada con mantequilla y oficializándolo con el nombre que tiene actualmente de croissant que por primera vez fue usado en 1863.

Y ahora viene aquí la gran pregunta. ¿Tú eres más de croissant curvo o croissant recto?

Hay un debate muy grande acerca de la forma del croissant. Hasta hace poquitos años, en España, el croissant tenía la forma de U, se comía con cuernos y se hacía con margarina o con manteca. Pero poco a poco son más los que aman el croissant recto de mantequilla cómo se prepara en el país galo y que garantiza más uniformidad en la textura y el sabor.

Ya que el croissant se hace a raíz de un triángulo de masa enrollado, si se le doblan las puntas, los cuernos quedan más secos y por lo tanto muchísimo más crujientes que el interior, lo que más les gusta a los enamorados del croissant en forma de U mientras que los puristas se decantan más por la uniformidad de la pieza.

En Martín Martín tenemos de los dos tipos de croissant para que nadie se quede sin el suyo y de los más de 500.000 croissants que vendemos al año, sí que tenemos que admitir que la mayoría son con cuernos, aunque el francés recto y de mantequilla cada día tiene más amantes que antes ya que la forma le da un sabor y una textura inigualables. En todo caso, hay muy pocos placeres más grandes que degustar uno de ellos junto al cafecito calentito del desayuno para empezar el día…